Con el "sellado" de la carne, NO conseguimos que se queden los líquidos dentro (para que quede más jugosa) aunque se le denomine así a esa técnica. Es más, el resultado es más bien lo contrario. Con las altas temperaturas, lo que estamos haciendo es ayudar a deshidratar, dorando el exterior. Además, la superficie tostada de la carne NO es impermeable, por lo que en cocinados posteriores, los líquidos del interior se "escaparán" igualmente. Ese tostado inicial lo único que favorece son las 'reacciones de pardeamiento' ('reacción de Maillard') de la carne, que sólo tendrán efecto en el sabor, haciéndolo algo más intenso. De querer dorar la carne, es preferible hacerlo al final, justo antes de presentarla en el plato. 'Trucos, ideas, recursos...' Listado de recetas .
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